- La Agencia Espacial Europea (ESA), como parte del Programa de Seguridad Espacial (S2P), ha sentado las bases de la tecnología que servirá para la Estimación del Riesgo de Colisión y Mitigación Automatizada (CREAM).
- Su objetivo es el desarrollo de tecnologías automáticas que sirvan para evitar colisiones, lo que se traducirá en una reducción de las tareas a las que se enfrentan los operadores de satélite, del tiempo que transcurre entre la conjunción y la toma de decisiones, y de las falsas alarmas.
- GMV es el contratista principal en dos de las tres actividades presentadas en el contexto de CREAM y también participa en la tercera.
El espacio está cada vez más congestionado y, hoy en día, evitar las colisiones de manera activa se ha vuelto una tarea cotidiana en las operaciones espaciales. Estas operaciones dependen de datos de vigilancia espacial que estén validados, sean precisos y lleguen con puntualidad. Para un satélite en órbita baja (LEO), cada semana se esperan cientos de alertas de conjunción. Una vez procesadas y filtradas, para cada satélite siguen quedando unas dos alertas semanales para las que se requiere que un operador debe llevar a cabo un análisis y seguimiento detallado.
En este marco, y como parte del Programa de Seguridad Espacial (S2P), la Agencia Espacial Europea (ESA) sentó en 2019 las bases de la tecnología que servirá para la Estimación del Riesgo de Colisión y Mitigación Automatizada (CREAM).
El programa CREAM tiene como objetivo desarrollar una tecnología que sirva para evitar de forma automatizada las colisiones para así reducir las tareas a las que se enfrentan los operadores de satélite (expertos trabajando en turnos 24×7, esfuerzos adicionales en las estaciones de tierra), el tiempo que transcurre entre la toma de decisión sobre la ejecución de la maniobra de evasión y la conjunción y, como consecuencia, para reducir el número de falsas alarmas, esto es, los casos en los que los equipos de control inician la preparación de una maniobra de evasión que al final resulta innecesaria, ya que una vez se actualizan los datos estos indican una baja probabilidad de colisión. Los planes de maniobra optimizados pueden ser cargados en al satélite y permiten la toma de decisiones tardía, lo que se facilita aún más con las actividades en marcha de desarrollo y pruebas del envío de comandos de emergencia. Como consecuencia de los lanzamientos de grandes constelaciones, las conjunciones entre las naves espaciales operadas serán cada vez más frecuentes. Por lo tanto, el programa CREAM también cuenta con actividades para coordinar la planificación de maniobras entre satélites activos.
La ESA ha iniciado tres actividades en el marco del programa CREAM.
La primera tiene como objetivo la definición de «Decisiones y el diseño de maniobras de evasión automatizadas». En el marco de esta actividad, se implementará, probará y validará un prototipo de software que contenga datos históricos de eventos previos de evasión de colisiones. A partir de estos datos, este software proporcionará las herramientas para tomar decisiones de forma autónoma basadas en la inteligencia artificial y el aprendizaje automático (machine learning) y propondrá una maniobra óptima para así evitar la colisión. GMV desde Rumanía lidera esta actividad, en la que también tienen una participación relevante GMV NSL Ltd, de Reino Unido, y Neuraspace, de Portugal. Este desarrollo se basa en el sistema autónomo de evasión de colisiones autoca de GMV, desarrollado para la ESA en el marco del programa ARTES y que finalmente fue aceptado en marzo de 2022.
La segunda actividad se centra en el «Desarrollo y prueba de métodos de comando tardíos y conceptos de operaciones». El objetivo de esta actividad es desarrollar y probar conceptos de métodos de comando tardíos que permitan la toma de decisiones retardadas en los procesos de evasión de colisiones. Este mecanismo debe considerarse parte del concepto de las operaciones de evasión de colisiones, así como una herramienta para proporcionar respuestas de emergencia. Astroscale Ltd, en el Reino Unido, lidera esta actividad (nota de prensa emitida por Astroscale aquí), con un importante apoyo de GMV (de Portugal, Rumanía y Reino Unido) y de OneWeb, en el Reino Unido.
La tercera y última actividad se llama «Medios para la coordinación de operadores y proveedores de catálogos». Este proyecto se encargará de desarrollar una plataforma de coordinación que proporcione una arquitectura de intercambio de información que sea capaz de coordinar y ofrecer una resolución automatizada de los posibles eventos de colisión entre los operadores de satélite y los encargados de mantener los catálogos de objetos espaciales o proveedores de servicios para evitar colisiones. Así mismo, ofrecerá un entorno de simulación para la evaluación de las prestaciones de estas operaciones. GMV Rumanía lidera esta actividad y cuenta con UPB, de Rumanía; Solenix, de Suiza; e Iguassu, de la República Checa, como subcontratistas.
En resumen, GMV juega un papel determinante en estas tres actividades del programa CREAM de la ESA, siendo contratista principal en dos de ellas. Esto confirma el liderazgo de GMV en la automatización y coordinación de las operaciones de evasión de colisiones en Europa.
Más de 70 ingenieros de GMV en total trabajan en las actividades de SSA/SST que tienen lugar en 7 países europeos, lo que la convierte en la principal industria y el mayor equipo de SSA/SST de Europa. Muchos de los esfuerzos de GMV en este campo están dirigidos a la ESA (en España, Francia, Alemania, Reino Unido, Rumanía, Portugal y Polonia), para el SST de la UE (en España, Francia, Alemania, Rumanía, Portugal y Polonia), así como al sector comercial (proporcionando servicios de evitación de colisiones a más de 10 operadores y más de 80 satélites a través de su centro de operaciones focusoc) y en el ámbito militar.