El lanzamiento y mantenimiento recurrente de megaconstelaciones espaciales exige transformar el sector para dotarlo de capacidad de producción industrial
La nueva dimensión comercial del espacio, sumada al fuerte interés de la UE en el sector, con inversiones previstas de más de 2.400 millones de euros, ofrece grandes oportunidades de negocio
La disponibilidad de los Fondos NextGen representa una oportunidad irrepetible para posicionar uno de los sectores industriales más intensivos en innovación y desarrollo tecnológico
Indra, una de las principales compañías globales de tecnología y consultoría, apuesta por el desarrollo en España de un sector del new space con capacidad para liderar grandes proyectos y lanzar al espacio constelaciones masivas de satélites con las que aprovechar las oportunidades de negocio que están surgiendo en este segmento de negocio, crítico para la digitalización del transporte, las comunicaciones, la defensa o la seguridad, entre otros ámbitos.
El director de Sistemas de Defensa y Espacio de Indra, Domingo Castro, destacó ayer miércoles en su intervención en el acto de apertura del Spanish Small Satellite International Forum, que se celebra del 23 al 25 de febrero en Málaga, “la necesidad de abordar una transformación bien planificada del sector para dar respuesta a los nuevos retos que plantea el Espacio” y explicó que “si bien las empresas espaciales españolas tienen capacidad para dar respuesta a los desafíos tecnológicos más complejos, no están preparadas para afrontar proyectos recurrentes, que exijan la producción industrial de un elevado número de sistemas o satélites”.
El pasado año Indra creó junto a Enaire la empresa Startical, que pondrá en órbita una constelación de 240 satélites de pequeño tamaño para prestar servicios que mejoren la gestión y seguridad del tráfico aéreo en todo el planeta. Más recientemente, la compañía ha entrado en el accionariado de la empresa Sateliot, que lanzará un centenar de satélites para facilitar el desarrollo de un internet de las cosas con conectividad 5G.
Para Indra, tanto Startical como Sateliot son proyectos que sientan las bases para consolidar la industria del new space en España. “La alta tasa de reposición de los satélites de estas constelaciones, y la recurrente oportunidad de actualizar las cargas de pago, sustenta la viabilidad de un modelo de negocio con ciclos de incorporación de nuevas capacidades y servicios en ciclos cortos, de tan solo 3 a 5 años, abriendo la posibilidad de una explotación según esquemas de Satellite as a Service”, destacó.
Disponer de un tejido industrial competitivo permitirá liderar además otros proyectos de despliegue de constelaciones que ya están surgiendo en todo el mundo. En los próximos años el número de satélites en órbita se triplicará, pasando de los 2.600 en servicio en este momento a más de 8.000 en 2024.
Para el directivo de Indra la disponibilidad de los Fondos NextGen representa una oportunidad probablemente irrepetible para la transformación y el posicionamiento del sector industrial nacional en el segmento del Espacio. “La revolución del sector industrial espacial español tiene que ser ahora”, remarcó.
En su opinión, la sostenibilidad de los presupuestos de la Comisión Europea y la ESA dedicados al Espacio, junto a la irrupción de nuevos Programas Flagship, representa otro importante vector de crecimiento. Tras el éxito logrado en programas como Galileo y Copérnico, la Comisión ha presentado recientemente una ambiciosa iniciativa dirigida a garantizar “la conectividad segura y soberana de las comunicaciones europeas, que podría contar con una inversión de 2.400 millones de euros, a la que se sumaría la aportación de estados e inversores privados, que elevaría esta cifra hasta los 6.000 millones”, explicó.
Domingo Castro señaló que la UE ha ido tomando conciencia progresivamente del carácter dual y de la creciente convergencia civil y militar del espacio y citó las palabras del Alto Representante de la Unión Europea, Josep Borrell, que en la pasada Conferencia Europea del Espacio afirmó que “nuestra libertad de acción depende de un acceso fiable, seguro y autónomo al Espacio”.
Para garantizar esta libertad de acceso, evitar colisiones con basura espacial, acciones hostiles o intentos de negar el uso del espacio radioeléctrico, se requiere el desarrollo de capacidades de vigilancia y seguimiento de objetos en el espacio (SST), disponer de un sistema de defensa aeroespacial, y el desarrollo de un sistema europeo que ordene un tráfico de satélites cada vez más congestionado.
Indra combina en este terreno un fuerte liderazgo en el sector de la Defensa y Espacio con una excepcional posición en el mércado de tráfico aéreo, en el que es uno de los mayores proveedores de sistemas del mundo, con soluciones implantadas en más de 160 países.
Lo satélites jugarán en los próximos años un papel central en la digitalización de cualquier economía y serán clave para asegurar la competitividad y sostenibilidad de todos los sectores. En el mundo de la defensa, las constelaciones de satélites aportaran la hiperconectividad que los ejércitos del futuro necesitan para operar en teatros de operaciones fuertemente digitalizados, en los que las plataformas y soldados necesitan intercambiar datos de forma continua para ganar ventaja sobre el adversario.
Acerca de Indra
Indra (www.indracompany.com) es una de las principales compañías globales de tecnología y consultoría y el socio tecnológico para las operaciones clave de los negocios de sus clientes en todo el mundo. Es un proveedor líder mundial de soluciones propias en segmentos específicos de los mercados de Transporte y Defensa, y una empresa líder en transformación digital y Tecnologías de la Información en España y Latinoamérica a través de su filial Minsait. Su modelo de negocio está basado en una oferta integral de productos propios, con un enfoque end-to-end, de alto valor y con un elevado componente de innovación. A cierre del ejercicio 2021, Indra tuvo unos ingresos de 3.390 millones de euros, más de 52.000 empleados, presencia local en 46 países y operaciones comerciales en más de 140 países.