• Por primera vez se desglosan las cifras del sector industrial de Seguridad
• El 19% de los 57.000 empleados directos de calidad y alta cualificación son mujeres
TEDAE presentó a finales de junio las cifras del año 2018, en las que por primera vez se desglosan de manera independiente los resultados del sector industrial de Seguridad. Los números del último ejercicio reflejan que la facturación de las empresas de TEDAE -defensa, seguridad, aeronáutica y espacio- alcanzaron los 11.838 millones de euros, lo que supone un aumento con respecto al ejercicio anterior de 5,9%. Del total facturado e 2018, el 44% corresponde a aeronáutica civil, el 32% a aeronáutica de defensa, defensa terrestre y naval contabilizaron el 15%, la actividad espacial un 8% y Seguridad, con gran proyección de futuro sobre todo en ciberseguridad, el 1%.
En cuanto al empleo, que creció en un 1,1%, se contabilizaron 57.000 trabajos directos de calidad y alta cualificación, de los cuales el 19% corresponden a mujeres. El presidente de TEDAE, Jaime de Rábago explicó durante la presentación a los medios que este porcentaje se asemeja “a la de mujeres que se gradúan en las universidades STEM que alimentan de profesionales a nuestras industrias, que oscila, según los años, entre el 17 y el 23%”.
Por sectores
La industria espacial española facturó 867 millones de euros el pasado ejercicio, y el empleo aumentó en un 5,4%. El vicepresidente de Espacio de TEDAE, Jorge Potti, explicó que este mayor crecimiento del empleo corresponde a la inversión que está haciendo la industria espacial en capacitación tecnológica y de equipos humanos. Destaca también el aumento significativo de las exportaciones hasta el 83%, mientras la I+D+i se mantiene, en un negocio que corresponde en un 42% al segmento vuelo, el 30% a operadores, 18% al segmento terreno y un 9% al de lanzadores.
Potti quiso resaltar que en los últimos años se está intensificando la participación de la industria española tanto en los programas de la Agencia Espacial Europea –ESA- como en los de la Unión Europea, cuya política espacial está ganando impulso. “Según estimaciones de la UE, el 10% de la economía de la Unión Europea depende del sector espacial. Y esto no dejará de crecer con el tiempo”. Y respecto a la cita trascendental de este año para el sector espacial español , la Conferencia Ministerial de la ESA que se celebrará en noviembre en Sevilla, subrayó que significa una gran oportunidad para que España alcance por primera vez una contribución equivalente a su PIB, en torno al 8%, en los próximos programas de la Agencia.
El sector aeronáutico ha continuado creciendo – un 0,9%, hasta los 9.029 millones de euros- otro ejercicio más. Y ha crecido ligeramente también en empleo –el 0,3%-, porque según Alfredo Martínez, vicepresidente de Aeronáutica de TEDAE, “los desafíos que vamos a afrontar en el ámbito aeronáutico en los próximos años nos aconsejan invertir en el recurso humano porque es lo que nos va a dar futuro”. Este talento que se distribuye a día de hoy al 50% entre titulados superiores y perfiles de Formación Profesional.
Debido al incremento del mercado interior, la exportación se tradujo en un 66%. A este respecto, el vicepresidente de Aeronáutica de TEDAE señaló que el pasado ejercicio el número de aviones vendidos en el exterior se redujo, lo que afecta a la cifra de exportación de toda la cadena de suministro, mientras se entregaron más aviones en el mercado español y se intensificaron actividades como el mantenimiento y se hizo un esfuerzo importante para seguir exportando en el mercado de aviación civil.
En cuanto a innovación, el I+D+i contempla un ligero descenso al 9%, con respecto al año anterior, la principal consecuencia reside en la finalización de algunos programas y no haber nuevos en marcha. “Estamos en una buena posición de salida para seguir creciendo –añadió Alfredo Martínez-, pero necesitamos nuevos programas para que generen riqueza. Agradecemos los esfuerzos que está realizando en este sentido el Gobierno en funciones, al adherirse al programa del FCAS para que no perdamos el tren tecnológico que se ha puesto ya en marcha”.
La industria de defensa ha experimentado una tendencia de evolución positiva. “Una industria –afirmó Susana Lapique, vicepresidenta de defensa de TEDAE- que ha demostrado fortaleza en años de crisis económica, con una tecnología y producto propio en todos los segmentos de actividad, con capacidad y sobre todo con vocación para participar en los consorcios industriales europeos e internacionales que se anuncian”.
La facturación de defensa descendió un 8% en 2018, dato que según Lapique responde a que el sector de Seguridad se ha desagregado por primera vez del de Defensa. “El ligero descenso -especificó- se refiere a la aeronáutica de defensa y se compensa con un incremento en la facturación del segmento naval y terrestre». La cifra de empleo disminuyó a los 20.519 profesionales, “coherente –explicó Susana Lapique- con el dato de facturación y por la segregación del sector de Seguridad”. La I+D+i se mantiene en el 11%, un esfuerzo innovador en el que se lleva trabajando muchos años y que permanece estable. Por su parte, la exportación de TEDAE se sitúa en el 60% del volumen de ventas, por el incremento del mercado doméstico y una menor actividad en el exterior.
En el ejercicio 2018 las estadísticas anuales de TEDAE contemplan el sector industrial de Seguridad de forma independiente, desagregándolo del sector defensa, y en menor medida del de espacio, en los que se integraba hasta ahora. Un sector que está creciendo y desarrollándose con gran impulso, dimensionándose como un sector diferenciado. En 2018 su volumen de actividad fue de 155 millones de euros, invirtiendo el 11% en I+D+i y generando un empleo que se acerca al millar de profesionales. “Tenemos que seguir avanzando –afirmó de Rábago- porque se trata de una industria con mucha proyección de futuro sobre todo en el ámbito de la ciberseguridad”.