Airbus ha realizado por primera vez una demostración de un vuelo de larga distancia en formación, dentro del espacio aéreo transatlántico regulado por el tránsito aéreo general (GAT). La demostración se llevó a cabo con dos aviones A350 que partieron de Toulouse (Francia) y llegaron a Montreal (Canadá), volando con una separación de tres kilómetros entre sí. Una comitiva recibió los aviones en el Aeropuerto Internacional de Montreal-Trudeau. En el trayecto se ahorraron más de seis toneladas de emisiones de CO2, confirmando así la posibilidad de reducir el consumo de combustible en más de un 5% en los vuelos de larga distancia.
El 9 de noviembre de 2021 se llevó a cabo el vuelo de demostración final con la participación de dos aviones de prueba A350: el MSN1 liderando el vuelo y el MSN59 tras él. Esta operación ha sido posible gracias a los sistemas de control de vuelo desarrollados por Airbus, que posicionan de forma segura el avión seguidor en la corriente ascendente que crea la estela del avión de cabeza y le permiten reducir el empuje del motor y el consumo de combustible. Un principio similar se puede observar en grandes aves migratorias como los gansos, que vuelan juntos en una característica formación en uve.
Sabine Klauke, Chief Technical Officer de Airbus, declaró: “Este vuelo de demostración es un ejemplo palpable del compromiso de Airbus con su hoja de ruta para la descarbonización. También refleja la importancia de la colaboración de todo el sector para hacerla realidad. Contamos en este proyecto con el firme apoyo de las aerolíneas y de las entidades socias de tráfico aéreo, así como de los organismos reguladores. Tenemos una oportunidad muy prometedora de implantarlo en los aviones de pasajeros a mediados de esta década. Imaginen el potencial que tendría el despliegue de fello’fly en todo el sector”.
Un grupo de pilotos de aerolíneas socias de Airbus, SAS Scandinavian Airlines y Frenchbee, participaron como observadores a bordo del vuelo transatlántico. El vuelo pudo llevarse a cabo gracias a Airbus y a sus socios de gestión del tráfico aéreo, así como a los proveedores de servicios de navegación (DSNA, NATS, NAV CANADA, Eurocontrol e IAA) con el apoyo de la DGAC. Juntos, demostraron que es posible aprovechar la tecnología de recuperación de energía de la estela en los vuelos fello’fly sin poner en riesgo la seguridad. Esta demostración también evidencia que las operaciones de fello’fly podrían impulsar significativamente el rendimiento medioambiental de los aviones comerciales y contribuir a los objetivos de descarbonización del sector de la aviación de forma inmediata.
El siguiente paso es recabar el apoyo de las autoridades para que este nuevo concepto operativo pueda certificarse y permita a las aerolíneas reducir su consumo de combustible y sus emisiones de CO2.
El innovador vuelo fello’fly de Airbus fue recibido a su llegada a Montreal por el Presidente del Consejo y por el Secretario General de la Organización de Aviación Civil Internacional de la ONU (OACI). El Presidente del Consejo, Salvatore Sciacchitano, declaró que la demostración constituía “ un ejemplo inspirador del nivel de compromiso actual para reducir las emisiones de la aviación”, mientras que el Secretario General de la OACI, Juan Carlos Salazar, destacó que reflejaba “la increíble variedad de iniciativas innovadoras que se están desarrollando en el sector del transporte aéreo para cumplir sus objetivos y garantizar que volar sea cada vez más sostenible”.
Fello’fly es un proyecto de demostrador de vuelo lanzado en 2019 que se basa en la biomímesis (el diseño y la producción de materiales, estructuras y sistemas inspirados en la naturaleza) y que desarrolla Airbus UpNext. Airbus UpNext es una filial al 100% de Airbus y forma parte del ecosistema de innovación de la compañía. Se creó para acelerar el desarrollo de las tecnologías del futuro mediante la fabricación de demostradores a escala y velocidad reales, a fin de evaluar, madurar y validar posibles nuevos productos y servicios que supongan avances tecnológicos radicales.