Futuro próximo de los grandes

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Además de esta componente estratégica, el mayor de los lanzadores europeos se ha convertido en el líder indiscutible dentro del mercado de los satélites de telecomunicaciones debido, principalmente, a dos factores: su altísima fiabilidad, superior al 97.5%; y su gran capacidad de carga, que le permiten situar en una Órbita de Transferencia Geoestacionaria (GTO) una carga superior a las 10 toneladas.
Precisamente esa gran capacidad le ha permitido adaptarse a las evoluciones del mercado, basándose en la agrupación de varios satélites (habitualmente 2) para optimizar los costes de puesta en órbita. Tradicionalmente, la masa de los satélites geoestacionarios oscilaba entre las 3.5 y las 4.5 toneladas, lo cual permitía ampliamente acomodar dos de ellos en un mismo lanzamiento. En los últimos años, la tendencia de estas plataformas ha tenido un marcado carácter alcista, situándose en la actualidad dicho rango en torno a las 4.5 a 5.5 toneladas y con previsión de que sigan incrementándose.

ste es el principal motivo de que la Agencia Espacial Europea (ESA), tras la reunión interministerial de 2008 pusiera en marcha una iniciativa de actualización del lanzador insignia europeo con aún más capacidad: Ariane 5 - Midlife Evolution (Ariane 5 - ME).

Cinco grandes objetivos son la razón de ser de este gran proyecto:

Incrementar la capacidad del lanzador hasta las 11.2 toneladas a GTO modificando tan solo la etapa superior de éste. Para ello se necesita un lanzador cuya masa total esté en torno a las 800 toneladas en el momento del despegue desde la base de lanzamiento europea de Kourou, en la Guayana Francesa.
De esta forma el emparejamiento de satélites de telecomunicaciones seguirá siendo posible. Además, dispondrá de una nueva cofia de 20 m de altura y un nuevo SYLDA (SYstème Lancement Double Ariane), que permitirán albergar satélites más grandes tanto en masa como en volumen.
Las dos grandes bazas por las que se ha apostado para conseguirlo se basan en la optimización de la masa del lanzador, con una configuración común de los tanques superiores; y la sustitución del actual motor de la etapa superior (ECA) por el nuevo motor Vinci, que aumenta sensiblemente la potencia.